Música judía hoy: desafío y misión
Hoy vivimos un renacimiento de la música judía. Desde cantantes jasídicos hasta fusión klezmer-electrónica, hay una nueva generación buscando expresar su judaísmo con ritmo y armonía. Pero con ello también viene el desafío de mantener la pureza del mensaje.
No toda música es sagrada, y no toda melodía inspira. El objetivo no es copiar los estilos externos, sino canalizar el alma judía a través de sonidos que eleven y conecten. Como escribió el Rebe de Lubavitch, la música tiene el poder de construir o destruir: por eso el músico judío tiene una misión sagrada.
Conclusión: el canto que nos une
La música no es un añadido al judaísmo. Es su pulso, su eco eterno. Cuando el pueblo judío canta, no solo expresa su fe: la revive. Cada generación tiene su canción, pero el alma que canta es la misma. Y mientras haya un judío que cante Torá con corazón, la sinfonía divina seguirá resonando por los siglos.
El Rav Berl Sokolowicz, es Rabino, educador y un cantautor conocido y reconocido en toda Latinoamérica e Israel. De origen Argentino, vive hace muchos años en Stgo. de Chile, donde es conocido como “el superhéroe de los Rabinos» por su perfil sorprendentemente polifacético: Es Rabino, educador en todos los niveles (¡desde Gan hasta Media de hombres y mujeres!), músico, Shojet, Mohel, Sofer… ¡Y ventrílocuo!.
El Rav posee una gran producción musical que incluye varios álbumes y canciones dirigidas al público de habla hispana, como “La Historia de Purim1”, “Shavuot», o “Melodías Para el Recién Nacido2”, Puede encontrarse en plataformas como Apple Music, Spotify, YouTube y Amazon, con catálogos enfocados en mitzvot y festividades: L’Hashem Anoji Ashira (2019), series Pintele Id (2019–2020), La Historia de Purim (2020), Shavuot (2020), Elul — Simjat Torá 2 (2020), El Tren de las Mitzvot (2020) y El Tren de las Mitzvot II (2022). El material está clasificado como música infantil/educativa y reúne temas como “Venishmartem Meod”, “Rodef Shalom”, “Bal Tashjit”, “Veshamru” y relatos de festividades.

